El republicano por la Florida tomó la palabra en la noche del 23 de marzo para llamar la atención al ayuno que realiza Antúnez en Villa Clara, y para expresar solidaridad con los demás presos políticos en la isla, como Mario Pérez Aguilera y Oscar Elías Biscet.
El congresista declaró que el pasado viernes tuvo el honor de hablar por teléfono con valientes disidentes que viven dentro de la pesadilla que es la Cuba de Castro, y que Antúnez le dijo: "Dígale a sus colegas, a los representantes del pueblo americano, que Antúnez ni se rinde, ni se va".
Antúnez, afirmó Díaz-Balart, es un hombre negro de 40 y tantos años, que fue encarcelado por primera vez cuando estaba en la secundaria por su apoyo a la democracia, y durante 17 años fue sometido a golpizas como preso político en las ergástulas de Castro, pero nunca claudicó.
El legislador agregó que sería un acto condenable aceptar la propuesta de que Cuba expulse a Biscet, Antúnez y otros futuros líderes de Cuba a Estados Unidos, a cambio de algunos espías de Castro que están confinados en Estados Unidos.
Desde el Pleno del Congreso de Estados Unidos, reitero mi admiración por esos líderes que hoy confrontan al monstruo totalitario desde dentro de Cuba, y que serán líderes de Cuba libre mañana.
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